Figuras destacadas de la comunidad criptográfica, incluido un experto legal, han argumentado que el ex presidente inmediato de la SEC frustró la ruta inicial hacia el ETF al contado de Bitcoin, solo para regresar para mostrar su apoyo.
En una publicación reciente, Perianne Boring, fundadora pro-Bitcoin de Digital Chamber, señaló que Jay Clayton, ex presidente de la SEC, había obstruido la aprobación de un fondo cotizado en bolsa de Bitcoin durante su mandato. Esta observación se produce en medio de la reciente admisión de Clayton de que la aprobación de un ETF al contado de Bitcoin es inevitable.
En una entrevista reciente, Clayton expresó una opinión contrastante, afirmando que el regulador estadounidense eventualmente aprobaría un ETF al contado de Bitcoin. Sin embargo, señaló que la probabilidad de respaldo en las primeras semanas de enero sigue siendo incierta.
La exposición de Perianne Boring llamó la atención de John Deaton, un abogado conocido por su postura pro-XRP, quien brindó información adicional sobre los desafíos planteados por las acciones de Clayton.
Deaton argumentó que es cien por ciento exacto atribuir la denegación de un ETF al contado a la permanencia “interesada” de Jay Clayton en la SEC. Según el abogado, sin las acciones de Clayton, el actual presidente de la SEC, Gary Gensler, no podría negar arbitrariamente la aprobación de un ETF al contado.
Además, Deaton destacó una reunión entre Clayton y Gensler el día antes de que se presentara el caso Ripple/XRP en 2020. Sugirió que se discutiera XRP durante su reunión, ya que el liderazgo de la SEC impugnó que todos los XRP constituían valores ilegales.
Además, Deaton mencionó la negativa de Clayton a implementar el Safe Harbor propuesto por la comisionada de la SEC, Hester Peirce. En palabras de Deaton, Clayton “se aseguró de mantener vago el estado regulatorio de Bitcoin y las criptomonedas”.
Paralelamente, el abogado señaló la posterior participación de Clayton en el asesoramiento a entidades como OneRiver sobre Bitcoin (BTC), Ethereum (ETH) y la política criptográfica tras abandonar la SEC. Deaton describe esto como un modelo de negocio lucrativo para Clayton y sus asociados.
