El aumento de la actividad en el caso en curso entre la Comisión de Bolsa y Valores de EE. UU. (SEC) y Ripple despertó el interés de los inversores en XRP esta semana. La altcoin en conflicto experimentó una volatilidad notable y arrojó ganancias consecutivas durante tres días. TradingView Los datos muestran que solo el viernes, XRP ganó un 4,52% al pasar de un mínimo diario de 0,51459 dólares a un máximo de 0,53683 dólares.
El movimiento de precios de XRP del viernes cerró una semana ocupada para la altcoin luego de una serie de eventos entre la SEC y Ripple. Ambas partes se involucraron en mociones y contramociones, discutiendo sobre el caso en curso y buscando que el tribunal fallara a su favor.
A principios de semana, la SEC presentó una demanda contra la “Moción de huelga” de Ripple, que buscaba que el tribunal descartara el testimonio y la prueba de Andrea Fox, la contadora de cumplimiento de la SEC. La firma fintech citó varias razones para su moción, incluida la inclusión tardía de nuevos materiales de expertos.
En su presentación, la SEC argumentó que el testimonio de Fox no equivalía a la inclusión de nuevo material experto y pidió al tribunal que desestimara la moción de Ripple. Más adelante en la semana, Ripple respondió a la presentación de la SEC con una moción de oposición, suplicando al tribunal que no la considerara.
Las partes interesadas de la industria como Bill Morgan, un renombrado abogado criptográfico, no vieron la posibilidad de que el tribunal concediera la “Moción de huelga de Ripple”. Sin embargo, prevé una situación en la que el juez permitirá que la firma la deponga con base en algunas pruebas periciales que ella aportó.
El ir y venir entre ambas partes reavivó el interés de los inversores y generó revuelo en el espacio criptográfico. Inyectó cierta volatilidad en XRP, especialmente porque los usuarios esperan que el caso llegue pronto a un final concluyente.
La SEC solicitó al tribunal que penalizara a Ripple con una multa de hasta 2 mil millones de dólares por vender XRP como valor a inversores institucionales. Ripple defiende su posición, con el objetivo de convencer al tribunal de una pena menor en el litigio en curso.
