Una vez más, las regulaciones por parte de los funcionarios de Estados Unidos sorprenden a la industria de las criptomonedas. Este 13 de septiembre, los demócratas de la Cámara de Representantes hicieron pública una propuesta para el proyecto de Ley de Infraestructura Fiscal que podría recaudar miles de millones de dólares, pero al mismo tiempo, restringir a los inversores.
Incluida en los 2 billones de dólares en subidas de impuestos, está la propuesta que añade las materias primas, las divisas y los activos digitales a la regla de “lavado”. Si se aprueba, recaudaría cerca de 16 mil millones de dólares en la próxima década.
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La nueva propuesta cierra una laguna jurídica empleada por algunos inversores, ya que los ayuda a eludir los impuestos sobre las ganancias de capital cuando venden con pérdidas. Para ello, los que deseen hacer negocios deben esperar 30 días antes de recomprar las acciones o realizar una inversión equivalente. De lo contrario, se trata de una “venta de lavado”, que no se considera una deducción de las ganancias de capital.
Por otra parte, las criptomonedas se incluyen actualmente en el ámbito de la propiedad según el Servicio de Impuestos Internos, IRS. Por lo tanto, no está sujeto a dichas normas. En la actualidad, los inversores en activos digitales pueden vender y comprar criptodivisas y reclamar deducciones. Aunque esta nueva propuesta cambia eso.
Kristin Smith, la directora ejecutiva de la Asociación Blockchain dijo a Bloomberg: “Nos sentimos cómodos con esta disposición siempre que sólo aplique las normas existentes a los criptoactivos y no conduzca a otras consecuencias no deseadas.”
Las regulaciones se acumulan
La nueva propuesta cambia la Ley de Infraestructura Fiscal que causó pánico en agosto pasado
Esta es la última noticia de regulación de las criptomonedas procedente de Washington en los últimos meses. Durante el verano, la industria de la criptomoneda sintió pánico ante el proyecto de ley inicial de infraestructura fiscal que clasificaba ampliamente el término “corredor” . Agrupaba a casi todos los actores de la comunidad en el mismo tramo de información.
Si se aprueba tal y como está tiene un potencial perturbador para la industria. Muchos dentro de ella, incluido el CEO de Coinbase, Brian Armstrong, calificaron el proyecto de ley como perjudicial para la innovación futura. Otros fuera del sector, como el senador Pat Toomey, se pusieron del lado de las criptomonedas. A pesar del rechazo de la industria, el Senado aprobó el proyecto de ley en la Cámara de Representantes.
Inicialmente, la sección con una mención a la industria de las criptomonedas era de tamaño reducido. Sin embargo, esta sección adicional, aunque menor, se suma al creciente cúmulo de trámites burocráticos. Según la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, los funcionarios se comprometen a tener una propuesta de impuesto sobre las criptomonedas terminada para el 27 de septiembre.
Junto con las regulaciones, el cripto se encuentra en el blanco de la estricta vigilancia de la Comisión de Seguridad e Intercambio de Estados Unidos, SEC. Recientemente, dos importantes empresas centradas en las criptomonedas, Coinbase y Uniswap, se enfrentan a las investigaciones de la SEC.
