La escalabilidad en la blockchain y el mundo de las criptomonedas, es una expresión que se utiliza para referirse a la capacidad de las cadenas de bloques de «escalar», es decir, de poder procesar más transacciones por segundo sin que ello afecte al rendimiento. En este caso, se dice que la cadena de bloques es «escalable».
En este artículo, explicaremos por qué la escalabilidad es un problema importante para la industria de las criptomonedas y cuáles pueden ser las consecuencias cuando una cadena de bloques no es escalable.
La escalabilidad es un problema importante para la industria de las criptomonedas
¿Por qué es importante la blockchain para la escalabilidad?
Las cadenas de bloques tienen límites en cuanto al número de transacciones que pueden realizar por segundo. Esto es algo bastante difícil de cambiar porque es la forma en que han sido programados lo que define cuántas transacciones pueden ser procesadas en un tiempo determinado.
Por lo general, cuando una cadena de bloques sale al mercado, el número de transacciones que puede realizar por segundo es suficiente para satisfacer la demanda. Muy a menudo, esta cifra es incluso mayor para anticipar una creciente popularidad futura.
Sin embargo, cuanto más antigua es la blockchain, menos transacciones por segundo puede manejar. Por ejemplo, Bitcoin sólo puede realizar 7 transacciones por segundo y Ethereum unas 15. Hoy en día, esta cifra es demasiado baja debido a la enorme popularidad de estas dos redes.
Ha habido actualizaciones en el pasado para mejorar el procesamiento de las transacciones, pero ambas blockchains tienen dificultades para escalar fácilmente.
Por ello, muchos competidores han entrado en el mercado con promesas de una escalabilidad excepcional. Están previstas futuras mejoras para Bitcoin y Ethereum, pero se necesita tiempo para implementarlas.
Cada blockchain tiene un número determinado de transacciones por segundo
¿Qué significa una red congestionada?
Estar en una red congestionada puede tener implicaciones negativas para los usuarios. Hay dos problemas principales:
– Los costes de realización de las transacciones son mucho más elevados. Los costes de las transacciones son mucho más elevados, lo que hace que las transferencias de pequeño valor sean poco atractivas porque el porcentaje de las comisiones que se cobran es demasiado alto. Sólo las grandes ballenas pueden seguir utilizando la red con costes insignificantes;
– El tiempo de procesamiento de las transacciones está aumentando. Como cada vez hay más usuarios en la blockchain y ésta ha llegado a sus límites, entonces es necesario esperar el turno para que se procese la transacción. En algunos casos, es posible acelerar el procedimiento pagando una tasa adicional.
Además de estos inconvenientes para los usuarios, las propias criptomonedas también pueden verse afectadas negativamente por su falta de escalabilidad. De hecho, los usuarios empezarán a buscar una solución alternativa para pagar menos comisiones y que sus transacciones se procesen más rápidamente. Esto es una ventaja para los competidores y puede hacer que las criptomonedas que no son escalables pierdan cuota de mercado.
Bitcoin sólo puede realizar 7 transacciones por segundo y Ethereum unas 15
¿Existen blockchain con infinita escalabilidad?
Todas las blockchain tienen un número máximo de transacciones por segundo. Mientras que algunos, como Bitcoin (7) y Ethereum (15), sólo pueden realizar un pequeño número de transacciones por segundo, para otros activos digitales el límite es mucho mayor. Algunas criptomonedas pueden procesar más transacciones por segundo que VISA, por ejemplo.
Sin embargo, las criptomonedas que pueden realizar muchas transacciones rápidamente utilizan el consenso, que es mucho menos seguro que el proof-of-work. En consecuencia, muy pocos de ellos son capaces de ganarse la confianza de los usuarios y, por tanto, tienen dificultades para ser aceptados.
Además, Bitcoin y Ethereum son activos digitales con una excelente reputación. Por ejemplo, Bitcoin nunca ha sido hackeado y Ethereum fue el primero en ofrecer contratos inteligentes, por lo que muchos desarrolladores han desarrollado Dapps (aplicación descentralizada) que se ejecutan en esta red, lo que permite a Ethereum mantener una ventaja competitiva significativa sobre sus competidores.
En el momento de escribir este artículo (19 de noviembre de 2021), algunas prometedoras blockchains sin problemas de escalabilidad se han posicionado en los activos digitales más capitalizados. Binance Coin, Solana y Cardano son algunas de las alternativas a Ethereum. Sin embargo, la red Ethereum debería conseguir superar sus problemas de escalabilidad con su versión 2.0.
Algunas blockchains sin problemas de escalabilidad se han posicionado en los activos digitales más capitalizados
