Los rivales de inversión refugio se mueven de forma inversa en un trimestre sumido en los informes de inflación mixtos, el FUD de Elon Musk y una Reserva Federal repentinamente dura.
La onza de oro ha pasado de los mil 707 con 45 dólares del 1 de abril a más de mil .750 dólares en la sesión del 30 de junio, que sigue en curso. Esto supuso un salto de aproximadamente el 3,9% en el trimestre.
Por su parte, el Bitcoin se ha desplomado más de un 40% hasta situarse por debajo de los 35 mil dólares, después de haber alcanzado un máximo de 65 mil dólares a mediados de abril, todo ello en el mismo periodo.
La correlación inversa entre los mercados de Bitcoin y del oro se disparó específicamente en abril y mayo de 2021. Los analistas de JPMorgan señalaron en mayo que los grandes inversores institucionales rotaron su dinero fuera de los sobrevalorados mercados de criptomonedas para buscar oportunidades al alza en el oro.
Refiriéndose a los datos de los futuros de Bitcoin en la Bolsa Mercantil de Chicago (CME), los analistas de JPMorgan dijeron que los inversores han estado liquidando sus posiciones desde octubre de 2020. Mientras tanto, las entradas de capital en los fondos cotizados en bolsa con oro han aumentado en correspondencia con las salidas del mercado de Bitcoin.
Un extracto del informe dice que “Lo que se espera de flujos de bitcoin es aún incierto y se espera una retracción continua por parte de los inversores institucionales. Durante el mes pasado, los mercados de futuros de bitcoin experimentaron su liquidación más pronunciada y sostenida desde que comenzó el ascenso del bitcoin en octubre pasado.”
El banco señaló que los inversores institucionales pueden haber tratado al Bitcoin como un activo sobrecomprado, especialmente porque la criptomoneda insignia pasó de 3 mil 858 dólares en marzo de 2020 a poco menos de 65 mil dólares en abril de 2021, una ganancia del 1.584%.
Mientras tanto, el oro alcanzó un máximo de 2 mil 075 con 82 dólares por onza en agosto de 2020, después de lo cual cayó hasta un mínimo de mil 676 con 86 dólares por onza en marzo.
Lucha por los refugios
La estrategia de inversión rotativa del Bitcoin al oro también tomó impulso después de que Elon Musk criticara a la criptodivisa por su huella de carbono, hasta el punto de suspender su aceptación como pago de la gama de su coche eléctrico Tesla.
El 19 de mayo, justo después de que Musk redoblara su ataque al mercado de Bitcoin, declarando que podría hacer que Tesla descargara todo su alijo de mil 500 millones de dólares en BTC, el Bitcoin se desplomó aproximadamente un 30%. El sesgo bajista aumentó también después de que China anunciara una prohibición completa de las actividades de criptodivisas, incluidas las operaciones relacionadas con la minería que aportaban una gran parte de la potencia de cálculo total de la red Bitcoin.
El Bitcoin cerró la sesión de mayo con una pérdida del 35,5%. Por otro lado, el oro se benefició de las dudas en el mercado de las criptomonedas, subiendo un 7,6% en el mismo mes.
Los inversores eligieron el oro en lugar del Bitcoin como un refugio más seguro, ya que temían que una mayor inflación estuviera a la vuelta de la esquina. Como resultado, el metal precioso subió un 3,78% en abril, cuando los precios al consumo en EE.UU. aumentaron a su mejor ritmo en más de una década, hasta el 4,2%. El mes siguiente -como ya se ha dicho-, el oro continuó su ascenso junto con una subida similar del índice de precios al consumo, que se disparó hasta el 5%.
El PCE básico, la métrica preferida de la Reserva Federal para medir la inflación, saltó a una tasa anual del 3,4% en mayo, la más alta en 29 años.
Jerome Powell, el presidente de la Reserva Federal, se mostró inflexible sobre el aumento de la inflación, ya que calificó las subidas de precios de “naturaleza transitoria”. Además, subrayó que el banco central mantendría sus programas fiscales expansivos para proteger a la economía estadounidense de las consecuencias económicas de la pandemia del coronavirus.
La Fed ha mantenido los tipos de interés cerca de cero y ha estado comprando cada mes 120.000 millones de dólares en bonos del Estado y valores respaldados por hipotecas desde marzo de 2020.
Junio sangriento
El mes de junio fue el único del segundo trimestre en el que el Bitcoin y el oro tuvieron una tendencia paralela.
En los días anteriores a la reunión de política monetaria del Comité Federal de Mercado Abierto, la cotización de los activos cotizaron no tuvo cambios. Esto fue en la segunda semana de junio. Los funcionarios de la Fed anunciaron que podrían subir los tipos de interés dos veces hasta finales de 2023, un año antes de lo previsto, para contener las tasas de inflación excesivas.
Tanto el Bitcoin como el oro cayeron en tándem tras el tono de halcón de la Fed. El oro, en particular, parecía tener perspectivas de registrar su mejor rendimiento mensual en junio desde 2016. Había bajado un 7,42% al momento de la publicación. Mientras tanto, el Bitcoin había caído más del 8,5% en el mismo período.
¿Qué sigue para el Bitcoin y el oro?
Una encuesta de los principales economistas realizada por Financial Times encontró que la mayoría de ellos espera que la Fed suba los tipos de interés al menos dos veces para finales de 2023, alineándose con precisión con el gráfico de puntos de los funcionarios del banco central.
Carsten Fritsch, analista de Commerzbank AG, recomendó vigilar el dólar estadounidense para medir la fortaleza del oro en las próximas sesiones, señalando que el principal lastre de junio para el metal precioso fue el fortalecimiento del billete verde.
El índice del dólar estadounidense, una referencia para medir la fortaleza del dólar frente a una cesta de las principales divisas fiduciarias, subió el miércoles hasta un máximo de una semana en 92,433.
“El oro no superó repetidamente la media móvil de 100 días en los últimos días, lo que fue una señal bajista”, dijo Fritsch a Bloomberg. “Ahora existe el riesgo de que los hasta ahora pacientes inversores de ETFs se suban al carro y vendan sus participaciones. Esto amplificaría el movimiento a la baja”.
Al mismo tiempo, los toros de Bitcoin recibieron advertencias similares mientras la criptodivisa lidiaba repetidamente con los riesgos de caer por debajo de los 30 mil dólares, un nivel de soporte psicológico.
Jill Carlson, socia de Slow Ventures, dijo a CNBC que las s**alidas institucionales de los mercados de Bitcoin **habían cobrado impulso recientemente, y añadió que los operadores deben ser “cautelosamente alcistas” con la criptomoneda.
Clem Chambers, director general del portal de análisis financiero ADFVN.com, predijo otro tramo a la baja para el Bitcoin, señalando que la ruptura por debajo de los 30 mil dólares pondría a la criptodivisa en el camino hacia los 20 mil dólares.
