Se alega que el director general de Mining Capital Coin (MCC) estafó a más de 65.000 inversores con 62 millones de dólares en una estafa piramidal de criptomonedas, según el Departamento de Justicia de los Estados Unidos.
Según el Departamento de Justicia, Luiz Capuci Jr. comercializaba los llamados «paquetes de minería», que garantizaban unos ingresos diarios del uno por ciento.
Según el Departamento de Justicia, Capuci desvió más de 11 millones de dólares de los inversores a sus propias carteras de criptomonedas, lo que le permitió disfrutar de un lujoso estilo de vida que incluía vehículos deportivos de alta potencia, un barco de lujo y opulentos inmuebles.
A continuación, el dinero se blanqueó a través de intercambios de criptomonedas en otros países.
Según Capuci, MCC podrá aprovechar la fuerza de una red de bots de intercambio, que podrán «realizar cientos de transacciones por segundo» utilizando tecnología punta.
Por desgracia para ellos, en ese momento estaba empleando sus bots para producir criptomonedas adicionales para él y sus socios.
Luis Quesada, Director Adjunto de la División de Investigación Criminal del FBI, señaló que «los mercados de divisas virtuales se están expandiendo rápidamente y, por desgracia, los fraudes de inversión en criptomonedas también se están desarrollando rápidamente».
El FBI, junto con sus colaboradores en la aplicación de la ley, se ha comprometido a combatir el fraude financiero en todas sus formas, incluidas las monedas virtuales, en todo el país.
A Capuci se le impone una pena potencial de 45 años de cárcel por conspiración para cometer fraude electrónico, fraude de valores y blanqueo de dinero internacional, todos ellos castigados con penas de cadena perpetua en prisión.
Todo era un plan para conseguir dinero
Según la acusación del Departamento de Justicia, la organización de Capuci es una estafa piramidal.
Afirma que empleó a promotores y colegas para hacer «marketing multinivel» de MCC y sus productos de inversión, y que les pagaba una comisión.
Entre los regalos promocionales se encontraban iPads, Lamborghinis, Apple Watches e incluso el Ferrari personal de Capuci.
MCC también está siendo criticada por la Comisión de Valores y Bolsa
El mismo día, el Departamento de Justicia acusó de fraude a MCC, a Capuci, a su cofundador Emerson Souza y a otras dos empresas propiedad de Capuci, como CPTLCoin Corp y Bitchain Exchanges.
Según la SEC, Capuci primero proporcionó ganancias en Bitcoin (BTC), pero luego requirió retiros en la criptomoneda Capital Coin (CPTL), propia de MCC.
Sólo a través de la bolsa de criptomonedas ficticia de Capuci, Bitchain, podían canjear su dinero. Debido a los evidentes defectos del kit de minería de MCC, se vieron obligados a renunciar a sus tokens o a comprar uno nuevo.
Según Kristina Littman, Jefa de la Unidad de Criptoactivos y Cibernética de la División de Aplicación de la SEC, «Capuci y Pires utilizaron los fondos de los inversores obtenidos a través de este esquema fraudulento para vivir un estilo de vida lujoso.»
El Tribunal de Distrito del Distrito Sur de Florida obtuvo en abril una orden judicial contra Capuci y sus coacusados, que les impide acceder a sus activos.
