Según el Financial Tribune, Irán está a punto de aceptar los pagos de importación en bitcoin para evitar el embargo estadounidense, un enfrentamiento entre ambas naciones, que no es nuevo.
En el origen del mal
La disputa entre Washington y Teherán no es nueva. La ruptura diplomática data de 1953, tras el golpe de estado fomentado por la CIA y el MI6 contra el gobierno de Mohammad Mossadegh para instalar a quien sería derrocado por la revolución islámica de 1979.
A esto le siguió la muy publicitada toma de rehenes en la embajada americana y cinco años después, el imperio empujó a Saddam Hussein a invadir a Irán.
Después de que Irán ganara la guerra, Estados Unidos impuso un embargo tras otro. En 2012, el país fue desconectado de la red SWIFT, reduciendo a la mitad sus exportaciones de petróleo durante un año.
China decidió desafiar
El presidente Obama volvió a conectar el país al sistema bancario mundial, antes de que Trump lo separara de nuevo. A diferencia de otros países, China decidió desafiar el embargo sobre la nafta persa.
De ahí la guerra comercial entre China y Estados Unidos, en un ataque directo al petrodólar que Irán se niega a aceptar a cambio de su petróleo. Nada enfurece más a los estadounidenses que desafíen su hegemonía monetaria.
Ante, esto China tiene la intención de invertir cientos de miles de millones de dólares en infraestructura (puertos de aguas profundas, refinerías de petróleo, etc.) para ayudar a Irán a reanudar sus principales exportaciones de petróleo.
Y es que la nación de Ciro el Grande tiene las segundas mayores reservas de petróleo del mundo después de Arabia Saudita. Además del yacimiento de gas más grande del mundo, compartido con Qatar.
Según la agencia de noticias IRNA, el embargo estadounidense ha impedido que Irán exporte 1.800 millones de barriles de petróleo desde 2018, lo que representa una pérdida de ingresos de $ 100 mil millones.
Una situación que el ministro de Petróleo, Bijan Namdar Zanganeh, planea cambiar, aumentando la producción de 2,3 a 6,5 millones de barriles por día.
Bitcoin frente a SWIFT
La red SWIFT engloba todas las finanzas mundiales y está controlada por Estados Unidos y Europa. Hay quienes afirman que es utilizada para imponer embargos.
Un arma financiera de destrucción masiva que impide a cualquier país pagar sus exportaciones o importaciones. Desconectarse de ella significa un desastre económico.
Empresas podrán comerciar con criptodivisas
Según el Financial Tribune, Alireza Peyman Pak, presidente de la Organización de Promoción de Acuerdos, declaró el 7 de enero que las empresas pronto podrán comerciar con criptodivisas.
“Estamos por finalizar un mecanismo que permitirá a los importadores y exportadores utilizar criptomonedas en sus transacciones”, anunció.
Por otra parte, el banco central del país empleará la minería de bitcoin nacional para pagar las importaciones de las empresas extranjeras.
Pack explicó que puede haber restricciones en algunos mercados objetivo, particularmente en países como Irak, Afganistán o Pakistán, pero no en mercados clave como Rusia, China, India, el este y el sur de Asia, donde el uso de criptomonedas está muy extendido.12 millones de iraníes ya poseen BTC u otras criptomonedas, es decir, un 14% de la población.
En las bolsas iraníes de BTC se negocia diariamente el equivalente a 180 millones de dólares, incluso, el Centro Presidencial de Estudios Estratégicos de Irán recomienda aspirar al 11% del hashrate mundial, frente al 3% actual.
Minería es legal, pero inestable
Aunque el gobierno iraní ha legalizado la minería de Bitcoin, parece que esta depende de las estaciones, por ejemplo, ahora, el invierno ha detenido las actividades.
Por otro lado, la minería ha provocado interrupciones en el suministro eléctrico, prohibiendo la calefacción.
Lo mismo ocurrió el año pasado, restringieron las operaciones de minería de Bitcoin en mayo de 2021 debido al mayor uso de energía por las altas temperaturas y el mayor uso de los aires acondicionados.
Situaciones similares se han dado recientemente en Kosovo y Argentina. Ambos países culpan de sus problemas energéticos a la minería de Bitcoin, no a la falta de inversión.
