CEO de Coinbase: Las cripto se irán offshore a menos que EE.UU. cambie su postura reguladora

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Armstrong insinuó que Coinbase podría trasladarse a otro país si no hay una legislación clara sobre criptomonedas en Estados Unidos.

Brian Armstrong, consejero delegado de Coinbase, cree que las entidades de criptomoneda con sede en EE.UU. y el Reino Unido podrían trasladarse a otros países si los organismos de control nacionales no aplican una legislación adecuada al sector.

También ha insinuado que su bolsa podría plantearse tal traslado si la situación regulatoria en Estados Unidos sigue siendo la misma.

Todo está sobre la mesa

Según Armstrong, las autoridades estadounidenses y británicas deberían aplicar normas adecuadas sobre criptomonedas para evitar la fuga de empresas locales a otros destinos:

“Esta es la razón por la que necesitamos claridad sobre la legislación y la regulación onshore, porque si el Reino Unido no tiene esto, si EE.UU. no tiene esto, estas empresas se van a construir en paraísos fiscales.”

El consejero delegado cree que el infame accidente del FTX en noviembre del año pasado puso de relieve la importancia de las normas aplicables a las criptomonedas.

Destacó que el Reino Unido ya ha empezado a trabajar en esa dirección, elogiando sus esfuerzos por “avanzar rápidamente en una regulación sensata de las criptomonedas para impulsar tanto el crecimiento económico como la protección de los consumidores.”

Preguntado sobre si Coinbase podría trasladarse a otro país, Armstrong dijo que “todo está sobre la mesa, incluida la reubicación o lo que sea necesario.” Aunque cree que EE.UU. podría ser un mercado clave para la criptoindustria, la actual incertidumbre regulatoria espolea ese potencial:

“Creo que dentro de unos años, si no vemos que surge esa claridad regulatoria en EE.UU., puede que tengamos que considerar invertir más en otras partes del mundo.”

Los problemas de Coinbase en EE.UU.

La SEC estadounidense inició una investigación el año pasado, sospechando que algunas de las criptodivisas que cotizan en la plataforma son valores no registrados.

La Comisión volvió a atacar en marzo de este año, emitiendo una notificación de Wells contra Coinbase. La posible acción coercitiva podría estar relacionada con los productos Earn, Prime y Wallet de la bolsa. Armstrong se mantuvo imperturbable ante las acusaciones de la SEC:

“Si bien entendemos que todo esto es parte del viaje hacia la reforma de nuestro sistema financiero, tenemos razón en la ley, confiamos en los hechos, y damos la bienvenida a la oportunidad para Coinbase (y por extensión a la comunidad cripto más amplia) de llegar ante un tribunal.”

Coinbase no es la única criptoempresa estadounidense que tiene un conflicto con la SEC. Esta última sondeó a Kraken en febrero de este año por una posible violación de las normas al ofrecer valores como servicios de apuestas a usuarios estadounidenses.

La plataforma puso fin a dichas ofertas y pagó 30 millones de dólares en concepto de restitución, intereses de demora y sanciones civiles.

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