La nueva medida de la criptobolsa pretende reducir la oferta del token LUNC, que está hiperinflado, pero es poco probable que tenga el efecto deseado que esperan los operadores.
Luna classic (LUNC), el token remanente de la fallida blockchain Terra antes de su reinicio, se disparó el lunes después de que Binance, la mayor bolsa de criptomonedas del mundo, desvelara un plan para reducir la oferta del token.
El precio de LUNC se disparó hasta un 60% tras la noticia, alcanzando un máximo de 0,00032 dólares, según el rastreador de precios de criptodivisas CoinGecko. Al cierre de esta edición, el token cambiaba de manos a unos 0,00029 dólares.
La repentina subida cogió por sorpresa a muchos operadores, especialmente porque muchos de ellos habían apostado que el precio de LUNC caería al conocerse que la Interpol había emitido una “notificación roja” contra el fundador de Terra, Do Kwon. A lo largo del día se han liquidado unos 1,5 millones de dólares en posiciones cortas, la cifra más alta en al menos tres meses, según Coinglass.
El colapso del ecosistema Terra en mayo fue una de las implosiones más dramáticas del mercado de las criptomonedas. Hizo desaparecer 60.000 millones de dólares de valor de mercado y provocó la insolvencia de algunas empresas de criptomonedas. A principios de este mes, las autoridades surcoreanas emitieron una orden de arresto contra Kwon por cargos de fraude.
Muchos desarrolladores que creaban aplicaciones en la cadena de bloques original y ahora abandonada se han trasladado a la recién reiniciada cadena de bloques Terra o a otras redes como Polygon o Kadena que se consideran más resistentes. Al menos un analista ha sugerido que LUNC es ahora una “moneda meme”, con pocos casos de uso más allá de proporcionar a los operadores especulación y ganancias (o pérdidas) rápidas.
