Si esta hipótesis es cierta, Ahluwalia dijo que el fraude perpetuado por FTX es “verdaderamente épico” y añadió que el director general de Enron fue a la cárcel por “infracciones menores que ésta”.
Sam Bankman-Fried, el director general de la bolsa de criptomonedas en quiebra FTX, es probablemente una de las personas más odiadas del mundo en estos momentos. Después de ser aclamado como el salvador de proyectos condenados, ahora se están diseccionando las posibles motivaciones personales de sus acciones.
En medio de los temores de contagio del FTX, la confianza de los inversores se ha visto gravemente afectada. El miedo extremo se ha apoderado del mercado, pero los comentaristas del sector siguen impulsando el Bitcoin.
Uno de ellos es el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, quien dijo que Bitcoin se creó precisamente para evitar que los malos actores estafen a la gente, incluyendo los “rescates y reasignaciones de riqueza” de Sam Bankman-Fried.
Además, han surgido informes de que el intercambio podría tener más de un millón de acreedores.
Más de un millón de acreedores
La semana pasada, cuando la bolsa se acogió a la protección voluntaria del capítulo 11 de la ley de quiebras, indicó que podría tener más de 100.000 acreedores. Ahora, en una presentación actualizada, parece que podrían ser más de un millón.
Los abogados de la empresa dijeron:
”De hecho, podría haber más de un millón de acreedores en estos casos del Capítulo 11.”
Esto da a entender el enorme impacto de su colapso tanto en los comerciantes como en los usuarios regulares de criptografía al por menor en lo que parece ser el mayor golpe en la industria.
FTX es lo contrario de Bitcoin
En un tuit reciente, el presidente salvadoreño dijo que FTX es lo opuesto a Bitcoin, al tiempo que llamó al ex director general de la asediada plataforma. El movimiento de “altruismo efectivo” de Bankman-Fried está ahora en el centro del debate. Con los informes sobre la insolvencia de su empresa, los rescates de Voyager y BlockFi parecen ahora “verdaderamente maquiavélicos”, según Ram Ahluwalia, director general y cofundador de una empresa de análisis.
Según la hipótesis de Ahluwalia, FTX se posicionó como “caballero blanco” cuando, en realidad, eran los “delincuentes”. Explicó que la bolsa estaba adquiriendo a sus acreedores “para ganar tiempo y ralentizar un ajuste de márgenes”. Ya se sabía que FTX tenía “cientos de millones en préstamos pendientes con Voyager”. Y añadió,
“Cuando no puedes pagar tu deuda, los deudores acaban con tu patrimonio y son dueños de tu empresa”. FTX, de una manera verdaderamente Lex Luthor, trató de comprar Voyager para evitar esto. La nueva matriz asume la responsabilidad de la filial. Además, FTX podría adquirir con su inflado, pero realmente sin valor, capital de 32.000 millones de dólares”.
El analista afirmó además que tanto FTX como su empresa comercial hermana, Alameda, tenían agujeros en su balance. En cuanto al pasivo, las dos empresas tenían préstamos que debían devolver. En el lado del activo, sus beneficios retenidos se habían agotado debido a las pérdidas por operar con un valor actual neto (VAN) negativo. Ahluwalia afirmó que la adquisición de Voyager y BlockFi proporcionaba soluciones temporales a ambos problemas.
“Requiere que el ‘objetivo’ tenga credibilidad en el adquirente y también requiere una diligencia debida inversa (ya que la forma de pago es el capital de FTX)”.
FTX, ¿la próxima Enron, o más grande?
El repentino colapso de FTX ha enfurecido a los criptoinversores. La aparición de informes que afirman que SBF utilizó los fondos de los clientes de la bolsa para tapar las pérdidas de su fallido imperio de criptomonedas ha llevado a muchos a pedir la cárcel para el ejecutivo. La investigación actual del Departamento de Justicia de EE.UU. está explorando si SBF era simplemente incompetente o si engañó deliberadamente a los usuarios.
Pero si la hipótesis de Ahluwalia resulta ser cierta, la naturaleza del fraude perpetuado será mayor que la del desgraciado titán de la energía Enron, que se dedicó a realizar prácticas comerciales y contables fuera de los libros a principios de la década de 2000.
Como se informó anteriormente, FTX se enfrenta actualmente a una investigación por parte del regulador de valores de Bahamas y de los investigadores financieros sobre una posible mala conducta. Su programa de tarjetas de débito, recientemente anunciado, con el gigante de los pagos, Visa, también fue cancelado por esta última.
