Blockchain es la tecnología crucial que impulsa la web descentralizada y altera una dinámica fundamental de la versión actual de la web, en la que las empresas exprimen a los consumidores para obtener la mayor cantidad de datos posible.
Los tokens impulsados por blockchain y la propiedad compartida abordan el problema fundamental de las redes centralizadas: el valor es acumulado por una única organización, que luego entra en conflicto con sus propias partes interesadas. Además, las DApps de Web3 garantizan la independencia de los datos mediante el uso de la tecnología blockchain.
Gracias a la descentralización, los usuarios se convierten en los propietarios últimos de los contenidos, ya que ninguna autoridad centralizada verifica los datos. Además, las DApps están alterando los paradigmas del compromiso y la gobernanza de la comunidad al permitir a los usuarios votar y dar ideas, ofreciendo a todos la misma oportunidad de participar en la implementación del proyecto.
Además de lo anterior, blockchain admite la creación de criptodominios, como .eth, .crypto y .dao. Un criptodominio descentralizado sustituye una dirección legible por humanos para la criptocartera de un usuario por una dirección IP, y estos nombres de dominio Web3 pueden negociarse como NFT en mercados de tokens no fungibles.
Un nombre de dominio descentralizado que representa una dirección blockchain es deseable porque es una dirección fácil de recordar para enviar y recibir criptomoneda, similar a una dirección de correo electrónico.
