Rusia ha sido el albergue de la represión de China sobre su sector de la criptominería, iniciada a principios de 2020, que provocó una migración masiva de las empresas mineras a jurisdicciones más favorables.
Los mineros han estado trasladando una enorme cantidad de hardware de acuñación de monedas a nuevas bases en todo el mundo, con Rusia, según se informa, llevándose la mayor parte entre varios destinos atractivos, incluidos los Estados Unidos.
Criptomineros huyen a Rusia, Kazajstán y EEUU
La afluencia de criptomineros chinos a varios países que ofrecen cierta claridad normativa o energía barata ha ido acompañada de un gran trasvase de equipos de minería.
Los datos recopilados por el Financial Times muestran que 14 de las mayores empresas de minería de criptomonedas del mundo han evacuado más de 2 millones de máquinas mineras fuera de la República Popular de China después de que el gobierno de Pekín lanzara una ofensiva nacional contra la industria en mayo.
América del Norte y Asia Central son los puntos calientes de la ciptominería, pero es Rusia la que ha ocupado el primer puesto.
El informe revela que al menos 205 mil dispositivos mineros han sido transportados a la Federación Rusa, de un total de más de 430.mil.
Después de que China decidiera perseguir a los criptomineros, la compañía rusa Bitriver recibió cerca de 200 mil máquinas de criptomineros chinos y la empresa Bit Cluster, con sede en Moscú, acogió 5 mil más.
Sin embargo, Rusia recibe el grueso de las máquinas criptpmineras chinas dado el éxodo de los criptomineros.
Su vecina Kazajistán, asimismo, se ha convertido en un importante destino criptominero porque mantiene una tarifa eléctrica reducida y alberga muchos centros de datos gestionados por empresas mineras de Chinas.
Según las estadísticas de diario, la mayor parte de los 87.849 equipos de criptominería chinos reubicados proceden de Bitfufu, que mandó 80 mil procesadores a criptogranjas a Kazajstán. De la empresa BIT Mining que desplegaron, hasta agosto, 7.849 dispositivos.
Ambos países ex miembros de la Unión Soviética enfrentan retos que tienen que ver con sus crecientes industrias de criptomonedas.
Rusia aún no ha regulado el sector y cada vez son más las opiniones de los funcionarios que consideran que la minería debería ser reconocida como una actividad empresarial y gravada en consecuencia.
Kazajstán está sufriendo una escasez de energía que se achaca en gran medida a los mineros de criptomonedas, mientras que las autoridades están considerando la introducción de un registro para los mineros y una tarifa eléctrica más alta.
Las cifras publicadas también muestran que ocho de las 10 mayores granjas de criptomonedas de Norteamérica han ampliado el número de dispositivos de minería que albergan desde que se aplicó la prohibición china.
Estados Unidos está justo detrás del país centroasiático, habiendo aceptado 87.200 máquinas de criptominería de China. Seguidamente, Canadá se ubica en el cuarto lugar con 35.400 dispositivos y les siguen naciones sudamericanas. Paraguay alberga 15.500 y Venezuela 7 mil.
¿Que se avecina?
Las liquidaciones en China han deprimido el precio de equipos mineros como el popular Antminer S19, señala el Financial Times. El valor del modelo cayó casi un 42% de mayo a julio, detalla el diario citando datos de mercado proporcionados por la empresa minera Luxor.
El fabricante chino de hardware de minería Bitmain, que construye y ofrece el dispositivo S19, anunció en junio que suspendía las ventas para “ayudar a la transición de la industria sin problemas” y reducir la presión del mercado.
“El foco del mercado ha pasado de la falta de equipos a la falta de espacio para su colocación”, comentó un representante de la rusa Bitriver